Uno de los edificios más viejos de la comunidad es la Casa de la Cultura, que hace muchos años estaba rodeado sólo de cantinas donde se cometían horribles crímenes, se ha convertido en un lugar lleno de misterio, causando el temor y la expectación de muchas personas que han estado en su interior, sintiendo presencias extrañas, viendo cómo los cuadros, pinturas y otros objetos se mueven de la nada y siendo testigos del espíritu de una pequeña niña que ronda los patios.
Este viejo edificio que fue construido a finales del siglo XIX como una vivienda por la que varias familias fueron pasando, incluso llegó a convertirse en una asociación mercantil, hasta que en 1997 fue comprada por el Ayuntamiento que la habilitó como Casa de la Cultura.
Relató el cronista de la comunidad Daniel Álvarez, que la Casa de la Cultura alberga un gran misterio y muchas historias que la gente cuenta respecto a este viejo edificio, y aunque personalmente nunca vio algo extraño o paranormal en las instalaciones de este edificio, sí llegó a sentir extrañas presencias en el Archivo Municipal.
Comentó que fue director del Archivo Municipal hace varios años, y había ocasiones que la Casa de la Cultura se quedaba vacía porque los funcionarios y talleristas salían para ir a sus viviendas a comer, era entonces cuando al estar trabajando dentro del archivo, empezaba a sentir presencias extrañas a su alrededor, por lo que mejor decidía cerrar el inmueble y retirarse a su casa como lo hacían todos.
“En ese entonces yo podía ver, aún no perdía la vista, y nunca jamás llegué a ver algo extraño en la Casa de la Cultura, pero como muchas otras personas sí sentía presencias extrañas al estar a solas en el inmueble, era el área del Archivo Municipal donde yo trabajaba y constantemente se me erizaba la piel al sentir que alguien más estaba rondando, pero no había nadie”.
Dijo que este misterio puede derivar de los horrendos crímenes que se llegaron a cometer en los alrededores de la Casa de la Cultura, que al menos estaba rodeada de 7 cantinas donde había muchos borrachos y crímenes muy frecuentes, pleitos y asesinatos entre quienes frecuentaban esas cantinas.
Resaltó que no es la única persona que ha sentido presencias extrañas, ya que hay gente que asegura haber visto personas o cosas fuera de lo normal en las viejas instalaciones que albergan la Casa de la Cultura, sobre todo del espíritu de una niña rubia de al menos 10 años de edad y trenzas que se pasea por los patios y salones de este lugar.
Mario García, quien durante varios años se ha desempeñado como tallerista y maestro en la Casa de la Cultura, también ha sido testigo de cosas fuera de lo normal en este lugar, de cómo los cuadros y fotografías aparecen en otros sitios distintos a donde los dejaron, e incluso con huellas de pequeñas manos.
Relató que suceden cosas muy raras en la Casa de la Cultura, principalmente por la pequeñita que se aparece en los patios y salones de las instalaciones, que una vez fue captada en fotografía junto a un gran árbol y que toda la gente ha escuchado sobre este acto paranormal.
Indicó que en la Casa de la Cultura suelen realizarse muchos eventos por la noche, y grupos numerosos de personas ven cómo las sillas se mueven de lugar ante el asombro y la expectación por los hechos paranormales que suceden, llenos de miedo por lo que sus ojos ven y que no dan crédito.
Comentó que los talleristas o maestros suelen dejar cuadros, fotografías y otros artículos en sitios específicos, pero al día siguiente que regresan para realizar sus actividades se topan con que han sido cambiados de lugar, pero nadie entró a los salones, incluso nadie entró a la Casa de la Cultura.
“En los cuadros y fotografías que se exhiben, han aparecido las huellas de pequeñas manos, creemos que es la pequeñita que se aparece y ronda por toda la Casa de la Cultura, son de verdad cosas muy raras que nos causan cierto miedo y nerviosismo a quienes estamos aquí frecuentemente, porque mucha gente es la que ha visto estas cosas”.
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